Julio 6 - Salmos 116, 117, 118, 119:1-35

Salmos 116:1-19 SRV
1  AMO á Jehová, pues ha oído Mi voz y mis súplicas.
2  Porque ha inclinado á mí su oído, Invocaré le por tanto en todos mis días.
3  Rodeáronme los dolores de la muerte, Me encontraron las angustias del sepulcro: Angustia y dolor había yo hallado.
4  Entonces invoqué el nombre de Jehová, diciendo: Libra ahora, oh Jehová, mi alma.
5  Clemente es Jehová y justo; Sí, misericordioso es nuestro Dios.
6  Jehová guarda á los sinceros: Estaba yo postrado, y salvóme.
7  Vuelve, oh alma mía, á tu reposo; Porque Jehová te ha hecho bien.
8  Pues tú has librado mi alma de la muerte, Mis ojos de lágrimas, Y mis pies de desbarrar.
9  Andaré delante de Jehová En la tierra de los vivientes.

10  Creí; por tanto hablé, Estando afligido en gran manera.
11  Y dije en mi apresuramiento: Todo hombre es mentiroso.
12  ¿Qué pagaré á Jehová Por todos sus beneficios para conmigo?
13  Tomaré la copa de la salud, E invocaré el nombre de Jehová.
14  Ahora pagaré mis votos á Jehová Delante de todo su pueblo.
15  Estimada es en los ojos de Jehová La muerte de sus santos.
16  Oh Jehová, que yo soy tu siervo, Yo tu siervo, hijo de tu sierva: Rompiste mis prisiones.
17  Te ofreceré sacrificio de alabanza, E invocaré el nombre de Jehová.
18  A Jehová pagaré ahora mis votos Delante de todo su pueblo;
19  En los atrios de la casa de Jehová, En medio de ti, oh Jerusalem. Aleluya.

Salmos 117:1-2 SRV
1  ALABAD á Jehová, naciones todas; Pueblos todos, alabadle.
2  Porque ha engrandecido sobre nosotros su misericordia; Y la verdad de Jehová es para siempre. Aleluya.

Salmos 118:1-29 SRV
1  ALABAD á Jehová, porque es bueno; Porque para siempre es su misericordia.
2  Diga ahora Israel: Que para siempre es su misericordia.
3  Diga ahora la casa de Aarón: Que para siempre es su misericordia.
4  Digan ahora los que temen á Jehová: Que para siempre es su misericordia.
5  Desde la angustia invoqué á JAH; Y respondióme JAH, poniéndome en anchura.
6  Jehová está por mí: no temeré Lo que me pueda hacer el hombre.
7  Jehová está por mí entre los que me ayudan: Por tanto yo veré mi deseo en los que me aborrecen.
8  Mejor es esperar en Jehová Que esperar en hombre.
9  Mejor es esperar en Jehová Que esperar en príncipes.
10  Todas las gentes me cercaron: En nombre de Jehová, que yo los romperé.
11  Cercáronme y asediáronme: En nombre de Jehová, que yo los romperé.
12  Cercáronme como abejas; fueron apagados como fuegos de espinos: En nombre de Jehová, que yo los romperé.
13  Empujásteme con violencia para que cayese: Empero ayudóme Jehová.
14  Mi fortaleza y mi canción es JAH; Y él me ha sido por salud.
15  Voz de júbilo y de salvación hay en las tiendas de los justos: La diestra de Jehová hace proezas.
16  La diestra de Jehová sublime: La diestra de Jehová hace valentías.
17  No moriré, sino que viviré, Y contaré las obras de JAH.
18  Castigóme gravemente JAH: Mas no me entregó á la muerte.

19  Abridme las puertas de la justicia: Entraré por ellas, alabaré á JAH.
20  Esta puerta de Jehová, Por ella entrarán los justos.
21  Te alabaré porque me has oído, Y me fuiste por salud.
22  La piedra que desecharon los edificadores, Ha venido á ser cabeza del ángulo.
23  De parte de Jehová es esto: Es maravilla en nuestros ojos.
24  Este es el día que hizo Jehová Nos gozaremos y alegraremos en él.
25  Oh Jehová, salva ahora, te ruego: Oh Jehová, ruégote hagas prosperar ahora.
26  Bendito el que viene en nombre de Jehová: Desde la casa de Jehová os bendecimos.
27  Dios es Jehová que nos ha resplandecido: Atad víctimas con cuerdas á los cuernos del altar.
28  Mi Dios eres tú, y á ti alabaré: Dios mío, á ti ensalzaré.
29  Alabad á Jehová porque es bueno; Porque para siempre es su misericordia.

Salmos 119:1-35 SRV
1  ALEPH. BIENAVENTURADOS los perfectos de camino; Los que andan en la ley de Jehová.
2  Bienaventurados los que guardan sus testimonios, Y con todo el corazón le buscan:
3  Pues no hacen iniquidad Los que andan en sus caminos.

4  Tú encargaste Que sean muy guardados tus mandamientos.
5  Ojalá fuesen ordenados mis caminos A observar tus estatutos!
6  Entonces no sería yo avergonzado, Cuando atendiese á todos tus mandamientos.

7  Te alabaré con rectitud de corazón, Cuando aprendiere los juicios de tu justicia.
8  Tus estatutos guardaré: No me dejes enteramente.

9  BETH. ¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra.

10  Con todo mi corazón te he buscado: No me dejes divagar de tus mandamientos.

11  En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti.

12  Bendito tú, oh Jehová: Enséñame tus estatutos.

13  Con mis labios he contado Todos los juicios de tu boca.
14  Heme gozado en el camino de tus testimonios, Como sobre toda riqueza.
15  En tus mandamientos meditaré, Consideraré tus caminos.
16  Recrearéme en tus estatutos: No me olvidaré de tus palabras.

17  GIMEL. Haz bien á tu siervo; que viva Y guarde tu palabra.

18  Abre mis ojos, y miraré Las maravillas de tu ley.

19  Advenedizo soy yo en la tierra: No encubras de mí tus mandamientos.

20  Quebrantada está mi alma de desear Tus juicios en todo tiempo.

21  Destruiste á los soberbios malditos, Que se desvían de tus mandamientos.

22  Aparta de mí oprobio y menosprecio; Porque tus testimonios he guardado.

23  Príncipes también se sentaron y hablaron contra mí: Mas tu siervo meditaba en tus estatutos.

24  Pues tus testimonios son mis deleites, Y mis consejeros.

25  DALETH. Pegóse al polvo mi alma: Vivifícame según tu palabra.

26  Mis caminos te conté, y me has respondido: Enséñame tus estatutos.
27  Hazme entender el camino de tus mandamientos, Y hablaré de tus maravillas.

28  Deshácese mi alma de ansiedad: Corrobórame según tu palabra.
29  Aparta de mí camino de mentira; Y hazme la gracia de tu ley.

30  Escogí el camino de la verdad; He puesto tus juicios delante de mí.
31  Allegádome he á tus testimonios; Oh Jehová, no me avergüences.
32  Por el camino de tus mandamientos correré, Cuando ensanchares mi corazón.

33  HE. Enséñame, oh Jehová, el camino de tus estatutos, Y guardarélo hasta el fin.
34  Dame entendimiento, y guardaré tu ley; Y la observaré de todo corazón.

35  Guíame por la senda de tus mandamientos; Porque en ella tengo mi voluntad.