Junio 23 - Salmos 55, 56, 57, 58, 59, 60

Salmos 55:1-23 SRV
1  Al Músico principal: en Neginoth: Masquil de David. ESCUCHA, oh Dios, mi oración, Y no te escondas de mi súplica.
2  Estáme atento, y respóndeme: Clamo en mi oración, y levanto el grito,
3  A causa de la voz del enemigo, Por la opresión del impío; Porque echaron sobre mí iniquidad, Y con furor me han amenazado.
4  Mi corazón está doloroso dentro de mí, Y terrores de muerte sobre mí han caído.
5  Temor y temblor vinieron sobre mí, Y terror me ha cubierto.
6  Y dije: ­Quién me diese alas como de paloma! Volaría yo, y descansaría.
7  Ciertamente huiría lejos: Moraría en el desierto. (Selah.)
8  Apresuraríame á escapar Del viento tempestuoso, de la tempestad.

9  Deshace, oh Señor, divide la lengua de ellos; Porque he visto violencia y rencilla en la ciudad.
10  Día y noche la rodean sobre sus muros; E iniquidad y trabajo hay en medio de ella.
11  Agravios hay en medio de ella, Y el fraude y engaño no se apartan de sus plazas.
12  Porque no me afrentó un enemigo, Lo cual habría soportado; Ni se alzó contra mí el que me aborrecía, Porque me hubiera ocultado de él:
13  Mas tú, hombre, al parecer íntimo mío, Mi guía, y mi familiar:
14  Que juntos comunicábamos dulcemente los secretos, A la casa de Dios andábamos en compañía.
15  Condenados sean á muerte, Desciendan vivos al infierno: Porque maldades hay en su compañía, entre ellos.

16  Yo á Dios clamaré; Y Jehová me salvará.
17  Tarde y mañana y á medio día oraré y clamaré; Y él oirá mi voz.
18  El ha redimido en paz mi alma de la guerra contra mí; Pues fueron contra mí muchos.
19  Dios oirá, y los quebrantará luego, El que desde la antigüedad permanece (Selah); Por cuanto no se mudan, Ni temen á Dios.
20  Extendió sus manos contra sus pacíficos: Viólo su pacto.
21  Ablandan más que manteca su boca, Pero guerra hay en su corazón: Suavizan sus palabras más que el aceite, Mas ellas son cuchillos.
22  Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo.
23  Mas tú, oh Dios, harás descender aquéllos al pozo de la sepultura: Los hombres sanguinarios y engañadores no demediarán sus días: Empero yo confiaré en ti.

Salmos 56:1-13 SRV
1  Al Músico principal: sobre La paloma silenciosa en paraje muy distante. Michtam de David, cuando los Filisteos le prendieron en Gath. TEN misericordia de mí, oh Dios, porque me devoraría el hombre: Me oprime combatiéndome cada día.
2  Apúranme mis enemigos cada día; Porque muchos son los que pelean contra mí, oh Altísimo.
3  En el día que temo, Yo en ti confío.
4  En Dios alabaré su palabra: En Dios he confiado, no temeré Lo que la carne me hiciere.
5  Todos los días me contristan mis negocios; Contra mí son todos sus pensamientos para mal.
6  Reúnense, escóndense, Miran ellos atentamente mis pasos, Esperando mi vida.
7  ¿Escaparán ellos por la iniquidad? Oh Dios, derriba en tu furor los pueblos.

8  Mis huídas has tú contado: Pon mis lágrimas en tu redoma: ¿No están ellas en tu libro?
9  Serán luego vueltos atrás mis enemigos el día que yo clamare: En esto conozco que Dios es por mí.
10  En Dios alabaré su palabra; En Jehová alabaré su palabra.
11  En Dios he confiado: no temeré Lo que me hará el hombre.
12  Sobre mí, oh Dios, están tus votos: Te tributaré alabanzas.
13  Porque has librado mi vida de la muerte, Y mis pies de caída, Para que ande delante de Dios En la luz de los que viven.

Salmos 57:1-11 SRV
1  Al Músico principal: sobre No destruyas: Michtam de David, cuando huyó de delante de Saúl á la cueva. TEN misericordia de mí, oh Dios, ten misericordia de mí; Porque en ti ha confiado mi alma, Y en la sombra de tus alas me ampararé, Hasta que pasen los quebrantos.
2  Clamaré al Dios Altísimo, Al Dios que me favorece.
3  El enviará desde los cielos, y me salvará De la infamia del que me apura; (Selah) Dios enviará su misericordia y su verdad.
4  Mi vida está entre leones; Estoy echado entre hijos de hombres encendidos: Sus dientes son lanzas y saetas, Y su lengua cuchillo agudo.
5  Ensálzate sobre los cielos, oh Dios; Sobre toda la tierra tu gloria.
6  Red han armado á mis pasos; Hase abatido mi alma: Hoyo han cavado delante de mí; En medio de él han caído. (Selah.)

7  Pronto está mi corazón, oh Dios, mi corazón está dispuesto: Cantaré, y trovaré salmos.
8  Despierta, oh gloria mía; despierta, salterio y arpa: Levantaréme de mañana.
9  Alabarte he en los pueblos, oh Señor; Cantaré de ti en las naciones.
10  Porque grande es hasta los cielos tu misericordia, Y hasta las nubes tu verdad.
11  Ensálzate sobre los cielos, oh Dios; Sobre toda la tierra tu gloria.

Salmos 58:1-11 SRV
1  Al Músico principal: sobre No destruyas: Michtam de David. OH congregación, ¿pronunciáis en verdad justicia? ¿Juzgáis rectamente, hijos de los hombres?
2  Antes con el corazón obráis iniquidades: Hacéis pesar la violencia de vuestras manos en la tierra.
3  Enajenáronse los impíos desde la matriz; Descarriáronse desde el vientre, hablando mentira.
4  Veneno tienen semejante al veneno de la serpiente: Son como áspide sordo que cierra su oído;
5  Que no oye la voz de los que encantan, Por más hábil que el encantador sea.

6  Oh Dios, quiebra sus dientes en sus bocas: Quiebra, oh Jehová, las muelas de los leoncillos.
7  Corránse como aguas que se van de suyo: En entesando sus saetas, luego sean hechas pedazos.
8  Pasen ellos como el caracol que se deslíe: Como el abortivo de mujer, no vean el sol.
9  Antes que vuestras ollas sientan las espinas, Así vivos, así airados, los arrebatará él con tempestad.
10  Alegraráse el justo cuando viere la venganza: Sus pies lavará en la sangre del impío.
11  Entonces dirá el hombre: Ciertamente hay fruto para el justo; Ciertamente hay Dios que juzga en la tierra.

Salmos 59:1-17 SRV
1  Al Músico principal: sobre No destruyas: Michtam de David, cuando envió Saúl, y guardaron la casa para matarlo. LIBRAME de mis enemigos, oh Dios mío: Ponme en salvo de los que contra mí se levantan.
2  Líbrame de los que obran iniquidad, Y sálvame de hombres sanguinarios.
3  Porque he aquí están acechando mi vida: Hanse juntado contra mí fuertes, No por falta mía, ni pecado mío, oh Jehová.
4  Sin delito mío corren y se aperciben: Despierta para venir á mi encuentro, y mira.
5  Y tú, Jehová Dios de los ejércitos, Dios de Israel, Despierta para visitar todas las gentes: No hayas misericordia de todos los que se rebelan con iniquidad. (Selah.)
6  Volveránse á la tarde, ladrarán como perros, Y rodearán la ciudad.
7  He aquí proferirán con su boca; Cuchillos están en sus labios, Porque dicen: ¿Quién oye?

8  Mas tú, Jehová, te reirás de ellos, Te burlarás de todas las gentes.
9  De su fuerza esperaré yo en ti: Porque Dios es mi defensa.
10  El Dios de mi misericordia me prevendrá: Dios me hará ver en mis enemigos mi deseo.
11  No los matarás, porque mi pueblo no se olvide: Hazlos vagar con tu fortaleza, y abátelos. Oh Jehová, escudo nuestro,
12  Por el pecado de su boca, por la palabra de sus labios; Y sean presos por su soberbia, Y por la maldición y mentira que profieren.
13  Acábalos con furor, acábalos, y no sean: Y sepan que Dios domina en Jacob Hasta los fines de la tierra. (Selah).
14  Vuelvan pues á la tarde, y ladren como perros, Y rodeen la ciudad.
15  Anden ellos errantes para hallar qué comer: Y si no se saciaren, murmuren.
16  Yo empero cantaré tu fortaleza, Y loaré de mañana tu misericordia: Porque has sido mi amparo Y refugio en el día de mi angustia.
17  Fortaleza mía, á ti cantaré; Porque eres Dios de mi amparo, Dios de mi misericordia.

Salmos 60:1-12 SRV
1  Al Músico principal: sobre Susan-Heduth: Michtam de David, para enseñar, cuando tuvo guerra contra Aram-Naharaim y contra Aram de Soba, y volvió Joab, é hirió de Edom en el valle de las Salina doce mil. OH Dios, tú nos has desechado, nos disipaste; Te has airado: vuélvete á nosotros.
2  Hiciste temblar la tierra, abrístela: Sana sus quiebras, porque titubea.
3  Has hecho ver á tu pueblo duras cosas: Hicístenos beber el vino de agitación.
4  Has dado á los que te temen bandera Que alcen por la verdad. (Selah.)
5  Para que se libren tus amados, Salva con tu diestra, y óyeme.

6  Dios pronunció por su santuario; yo me alegraré; Partiré á Sichêm, y mediré el valle de Succoth.
7  Mío es Galaad, y mío es Manasés; Y Ephraim es la fortaleza de mi cabeza; Judá, mi legislador;
8  Moab, la vasija de mi lavatorio; Sobre Edom echaré mi zapato: Haz júbilo sobre mí, oh Palestina.
9  ¿Quién me llevará á la ciudad fortalecida? ¿Quién me llevará hasta Idumea?
10  Ciertamente, tú, oh Dios, que nos habías desechado; Y no salías, oh Dios, con nuestros ejércitos.
11  Danos socorro contra el enemigo, Que vana es la salud de los hombres.
12  En Dios haremos proezas; Y él hollará nuestros enemigos.